domingo, 28 de octubre de 2012

Seis años sin Marga de Marisi


Acudes a mí cada otoño.
Yo te abrazo
ante los sorprendidos ojos plateados de la niebla.
Te quedas conmigo en torno al fuego
y me cuentas historias de tu tierra.
Envuelves con tus manos
mi grisácea pereza
y
me rescatas de esta cama
algodonada de tristeza.
Hoy seremos,
quizás,
las hojas del castaño,
o puede
que de tubérculos la esencia.
Ya raíces,
ya paseos vespertinos por la sierra,
ya unos ojos cubiertos de llovizna
o las aguas desbordadas de una acequia.
Somos tierra,
eres humus,
yo soy barro.
Somos cal
que cada otoño
alza la voz
y blanquea
de tu hogar
de hoja perenne
la pétrea memoria
de silenciosa experiencia.

Un beso, os quiero. Marisi.
(Seis años sin Marga).

sábado, 27 de octubre de 2012

Carta de Juan

A Ella:
Perdón por no saber expresarme en versos, quizá no atendí lo suficiente a tus explicaciones en clase, Perdón si a veces no recuerdo tus consejos, quizás era demasiado niño. Pero solo tú supiste ver algo más que eso en mí.
Ya hace algunos años que tu sonrisa no brilla mas que en los sueños de aquellos que te recuerdan, yo aún lo hago, cada vez que leo ese libro que me acompaña allá donde voy. Saberme tus poemas de memoria, porque a parte de un leve recuerdo de bellos momentos y alguna que otra foto es lo único que tengo tuyo.
Poesías que me ayudan en mis momentos más bajos, en esos momentos en los que solo leerte me ayuda a salir de ellos.
Algunos pensaran que por que te recuerdo, que por que yo y no otro alumno, pues la explicación solo la tengo yo y prefiero conservarla. Esos momentos en los que me ayudabas, esos consejos que me dabas, y puedo decir orgulloso que comencé a ser feliz gracias a ti, cuando pude romper esas barreras personales que obstaculizaban mi vida, cuando mi identidad cobró un poco mas de sentido porque con tu ayuda todo fue mas fácil.
Aun recuerdo como pintabas con tu pintalabios preferido mis mejillas para salir a escena, cómo me regañabas para que todo saliera bien, y como confiaste en mí siempre para llevar a cabo esos proyectos que para algunos fueron una tontera pero para mí siempre fue algo mas.
Como bajaste ese año la escalera para decirme que habías movido todos los hilos para ser mi tutora y como sin darme cuenta nunca llegaste a dar esa clase magistral. Esa pizarra que siempre estuvo ausente de tus palabras marcadas en tiza y que nunca llegaron a escribirse.
Mucha gente vino, pocos como tú, o quizá sí, pero no me permití darle una oportunidad.
Hoy 27 de octubre de 2012 escribo esto recordándote, pensándote, y a sabiendas que ya sólo estás en la poesía escondida en forma de verso.
Hoy 27 de octubre de 2012, YO sigo recordándote y mientras mis lágrimas caen encima del teclado me siento orgulloso de recordarte.
A ella, a una amiga que se fue, pero que sigue estando.
A MARGARITA PERUJO NEBRO.

Seis años sin Marga de Paco

Y morirme contigo si te matas
Y matarme contigo si te mueres
Porque el amor cuando no muere mata
Porque amores que matan nunca mueren....
 
Y no lo hice,
no ahogué mi vida de nuevo.
 
Quizás fue el miedo culpable
Aunque suenen mejor
las ganas de recordarte.
Y no es más cobarde sobrevivir 
cuando también falta el aire.
 
O tal vez fuese el considerar 
Que el tiempo es relativo 
(y ya sale el físico)
¿Será la espera  fin de camino?
 
Después de contar tus lunares
No cabe deshacer la vida,
perdido por los rincones. 
 
Cambiaste de papel, mi diosa,
del mundano y terrenal ardiente
a ese otro omnipresente.
Se qué no lo querías en vida
Pero ....
 
Y sé que nunca mía 
Y sí mía también...
a mi aire siempre.
 
Tuviste de cara la vida.  
domaste la muerte...
 
Postigos de yeso entreabiertos,
a la lástima no dejaste 
gobernar recuerdos,
a seis años de aquello
te rinden homenajes por lo que fuiste,
no porque no llegases a serlo,
y algunos,
yo entre ellos,
por lo que sigues siendo.
 
 
 
Sí, quiero
Sí, desde que decidas comportarte
en lo que a mis defectos se refiere
es fácil de llevar la peor parte
del que te hace reír si bien te quiere.
 
No quieras colocarme en los altares
no abuses del derecho de admisión
no tardes en contarme los lunares
procura no olvidarTE en un rincón.
 
De ahora, del momento, del durante
del vivo, del despierto, del que ladre
de todo el que me sabe decir NO
 
del niño, del amigo, del amante
del sueño, del suspiro, de mi madre
de lo que va a su aire, TUYA no.